Cerca de 100 personas se congregaron en pleno centro de la capital argentina, enfrente del consulado chileno, al mediodía del miércoles 18 de agosto, para solidarizar con los presos políticos mapuche, que ya completan 32 días en huelga de hambre en cárceles de Temuco, Lebu, Valdivia, Traiguén, Angol y Concepción.
La manifestación fue convocada por variadas organizaciones de derechos humanos argentinas, entre ellas la Comision por la Libertad de Pascual Pichún, formada para demandar la libertad de Pascual Pichún, periodista popular mapuche, quien se exiliara en Argentina hace 5 años. Desde aquella fecha se encontraba estudiando periodismo en la Universidad de La Plata. Sin embargo, Pascual Pichún fue detenido en febrero pasado por la policía chilena, mientras se dirigía a la comunidad de su familia, en Temuco, y se encuentra actualmente detenido en la cárcel de Traiguén.
Las organizaciones asistentes al acto, entre las que se hallaban agrupaciones de mapuche, diaguita, guaraníes y toba que residen en el gran Buenos Aires, repudiaron la aplicación de la ley antiterrorista por parte del estado chileno para juzgar a los activistas mapuches. Por otro lado, se recordó que existe un cerco informativo sobre la huelga de hambre de los presos mapuche, que se acentúa en la zona del conflicto -las regiones del Bío Bío, Araucanía y Los Ríos- cuyos mayores medios de comunicación responden principalmente a la derecha y los empresarios (El Diario Austral/El Mercurio).
Al final del acto se entregó a Jorge Salinas, cónsul de Chile en Buenos Aires, una carta dirigida al presidente Piñera, en donde se le exige el respeto a los derechos de los mapuche detenidos y el cese de la represión y la militarización de las comunidades. “Nos preocupa que en el marco de la defensa de sus territorios sean juzgados por la ley 18.314 sobre conductas terroristas, creadas por la dictadura de Pinochet para perseguir a sus opositores políticos”, señala la misiva.
Por Felipe Montalva, desde Buenos Aires.-